La Visión y Misión que quería llevar a cabo
Tesla estaba fascinado por la energía radiante y su posibilidad de convertirse en energía libre y gratuita. Sabía que era posible tomar energía directamente “conectándose a la verdadera fuerza de la naturaleza”.
La nave Tierra, necesitaba un plan de vuelo moderno. Tesla quería ayudar a las naciones menos privilegiadas. Sabía, y no ha cambiado nada, que miles de personas mueren de hambre al día, muchos de ellos niños.
Los que dirigen nuestra economía, pensaba Nikola, en el mundo occidental, nos permite disfrutar de un alto estándar de vida, de placer comparado con nuestros vecinos al sur de la línea imaginaria que llamamos límite.
La energía dirige la economía de las naciones y la meta de vida de Tesla, fue hacer la energía eléctrica igualmente accesible y disponible para todas las personas en cualquier lugar del planeta y eso le hundió, le señaló.
Fue objeto directo de ataques personales, de intentos de manchar su brillante carrera, de aislarlo en la más absoluta de las miserias. Sin embargo, ante las adversidades, continuó promoviendo su plan para la transmisión inalámbrica de energía.
¿Porqué aún la energía no ha sido hecha de igual acceso para todas las personas y todas las naciones? ¿Por qué nunca se han materializado los tan recomendados dispositivos de energía libre descritos por Tom Bearden, Jhon Bedini, Bruce Desalma y otros?
Nikola era un hombre lleno de contrariedades, serio y reservado, pero también encantador. Aunque era solitario, sabía atraer a la gente que le rodeaba. Delgado y alto, siempre vestido perfectamente, con su postura aristocrática y con elegancia, llamaba la atención.
Murió a los 86 años.
Sus inventos y teorías fueron olvidados a conciencia. ¿Porqué? ¿Qué ocurrió en realidad? ¿Quién quiso que sus inventos cayeran en el olvido?
Durante una temporada Tesla trabajó con Edison y le admiraba. Pero Edison no le respetaba a él, le hacía trabajar 18 horas al día durante los siete días de la semana solucionando los problemas técnicos que se le presentaban.
Tesla describió cómo podía mejorar el efecto del generador de Edison, éste respondió: “Le daré 500 dólares si usted logra hacerlo”.
Tras meses de trabajo Nikola lo logró. Edison, sin darle el dinero prometido, dijo: “Tesla, usted no entiende el sentido del humor de los norteamericanos”. Ante ello, Tesla se despidió. Edison envidiaba el gran cerebro de Tesla y su arma era la humillación.
Comenzó a trabajar entonces en la construcción y más tarde creó su propio laboratorio.
Pero los monopolistas de energía tenían mucho poder y nadie quería cambios. Tesla decía que podía transmitir noticias y energía sin usar alambres, pero los magnates banqueros (¿os suena?) ya habían comprado las minas de cobre para cubrir gran parte del país con redes de cables para la distribución de la energía.
Tesla siguió desarrollando la transmisión de energía gratuita por todo el mundo en el laboratorio que construyó en 1889 en las montañas de Colorado Springs.
Creó una torre de alta tensión para demostrar el transporte de energía sin cable y gratuito y al pedir más dinero para seguir con las investigaciones, se lo denegaron con intención premeditada.
El proyecto “Wardenclyffe”, así llamado, tuvo que ser abandonado por falta de presupuesto y su torre destruida.
En 1934 Tesla fue entrevistado en “The Times” y dijo: “Espero vivir el tiempo suficiente hasta ser capaz de colocar un aparato en esta habitación que se ponga en marcha con la energía de los medios que se mueven alrededor”.
Cuando Nikola falleció, sus grandes inventos de los diez últimos años fueron olvidados y, deliberadamente, se hizo que se le recordara por su excentricidad.
Dos hechos importantes hicieron caer sobre él todo el peso de la ignorancia: Su negativa a enviar cualquier artículo a la comunidad académica haciendo que ésta se opusiera a todos sus inventos por magníficos que fueran; y su constante preocupación por obtener una energía libre, gratuita para todo el mundo, algo que lógicamente los amos y señores del poder económico no estaban dispuestos a permitir en un mundo ya canalizado para ser explotado sólo por ellos.
A su muerte la historia manipulada intento borrar su huella y exaltar a hombres como Edison que fue proclamado el padre de la energía y que se unió sin reparo a las críticas contra Tesla a pesar de que sin él, Edison no hubiera sido nadie.
En 1901 Marconi envió su famosa radio señal diciendo haber inventado la radio. Pero utilizó 17 patentes de Tesla y la Corte Suprema corrigió el error en 1943 después de la muerte de Tesla. A pesar de este veredicto, la historia se ha encargado de borrar a este gran hombre que trabajaba para la humanidad y no para su propio beneficio o el de unos pocos.
Fue a contracorriente y le marcaron el destino del olvido.
Nikola Tesla creía en sus inventos para beneficio de la humanidad. Por eso no estaba de acuerdo con la industria de aquella época, que veía sus trabajos cómo un gran peligro para las fuentes de ingreso.
La situación no ha cambiado hoy día. Las multinacionales no permiten que se conozca o que se ponga en práctica la obra de Tesla. Cometerían un suicidio si los inventos de este gran hombre se fabricaran.
Entre sus logros figuran la invención de la radio, el motor de corriente alterna, luchaba por la investigación de un estándar eléctrico, la lámpara de pastilla de carbono (luz de alta frecuencia), el microscopio electrónico, un avión despegue y aterrizaje vertical, la resonancia, el radar, el submarino eléctrico, Bobina de Tesla, Rayo de la muerte, control remoto, Rayos X, métodos y herramientas para el control climático, transmisión de video e imágenes por métodos inalámbricos, transferencia inalámbrica de energía, sistemas de propulsión de medios electromagnéticos (son necesidad de partes móviles), extracción de energía en grandes cantidades desde cualquier punto de la Tierra, etc.
Debió de ser considerado el mayor científico y el mejor inventor de la historia.
Presento, La unidad de medida del campo magnético B del Sistema Internacional de Unidades (también denominado densidad de flujo magnético e inducción magnética), el Tesla, fue llamado así en su honor en la Conférence Générale des Poids et Mesures (París, en 1960), como también el efecto Tesla de transmisión inalámbrica de energía a dispositivos electrónicos (que Tesla demostró a pequeña escala con la lámpara incandescente ya en 1893 y el cual pretendía usar para la transmisión intercontinental de energía a escala industrial en su proyecto inconcluso, la Wardenclyffe Tower (Torre de Wardenclyffe).

Inventó el radio, el control remoto, la lámpara flourescente y el submarino eléctrico.
Aparte de su trabajo en electromagnetismo e ingeniería electromecánica, Tesla contribuyó en diferente medida al desarrollo de la robótica, el control remoto, el radar, las ciencias de la computación, la balística, la física nuclear, y la física teórica. En 1943, la Corte Suprema de los Estados Unidos lo acreditó como el inventor de la radio. Algunos de sus logros han sido usados, no sin controversia, para justificar varias pseudociencias, teorías sobre OVNIS y sobre anti-gravedad, así como el ocultismo de la Nueva era y teorías sobre la teletransportación.
Aparte cabe destacar que Tesla fue el primer hombre que recibió señales de radio procedentes del espacio exterior. En la actualidad han permitido verificar que efectivamente recibió señales de estrellas distantes.
Se decía que Tesla sólo dormía tres horas al día, incluso personas cercanas a el, aseguraban que permanecía activo hasta 150 horas.
Antes de morir, Tesla mostró signos de enfermedad mental, afirmando ser visitado diariamente por una paloma blanca.
El mismo tenia problemas financieros, por ende tenia que mudarse de lugar en lugar por las grandes deudas que ocasionaba, pero se dice que dejo muchos archivos de sus proyectos e inventos en forma de paga a los lugares donde habito.
Cuando Tesla murió el 7 de enero de 1943, a la edad de 86 años, representantes de la Oficina de Propiedad de Extranjeros, a petición del FBI, fueron a los hoteles de Nueva York y se apoderaron de todas sus pertenencias. Dos cargas de camiones de papeles, muebles y artefactos fueron enviados bajo sello a la Compañía de Bodegas y Almacenamiento de Manhattan.
Los Diarios perdidos de Nikola Tesla
Después de la muerte de Tesla hubo una revuelta realizada por el gobierno de los Estados Unidos para encontrar todos sus papeles, notas e investigaciones antes de que otros poderes extranjeros pudieran encontrarlos. La sobrina de Tesla, Sava Kosanovic reportó que antes de que llegara la OAP, alguien más obviamente había revisado las pertenencias de Tesla y tomó una desconocida cantidad de notas y papeles personales.
Era conocido por el FBI que la inteligencia alemana ya había hecho desaparecer una gran cantidad de las investigaciones de Tesla varios años antes de su muerte. El material robado, se piensa, eventualmente resultaría en el desarrollo de los platillos voladores de los Nazi. Los Estados Unidos iban a asegurarse que esto no sucediera de nuevo. Cualquier cosa, aun remotamente asociada con este gran hombre fue rápidamente confiscada y perdida dentro de las redes secretas de los Estados Unidos antes de la II Guerra Mundial. Sin embargo, más de una docena de cajas con las pertenencias de Tesla, dejadas atrás en hoteles como el Waldorf Astoria, el Hotel Governor Clinton y el San Regis ya habían sido vendidos para pagar las excepcionales cuentas de Tesla.
La mayor parte de estas cajas y los secretos que contenían nunca han sido encontradas. En 1976, cuatro cajas indistinguibles de papeles fueron subastadas en la venta de la propiedad de un Michael P. Bornes. Poco es conocido acerca de Bornes, excepto que había sido un vendedor de libros en Manhattan. Esta subasta tuvo lugar en Newark, Nueva Jersey, con las cajas y sus contenidos siendo comprados por Dale Alfrey por la suma de veinticinco dólares.
Alfey no tenía idea lo que había en las cajas al comprarlas en un capricho. Cuando más tarde las revisó, estaba sorprendido de encontrar lo que parecían se documentos de laboratorio y notas personales de Nikola Tesla. Algunos de los papeles perdidos de Tesla, nuevamente, habían resurgido. No obstante, debido a ignorancia casi se pierden una vez más.
En 1976, el nombre Nikola Tesla no era extensamente conocido. Alfrey no tenía idea de la importancia de los papeles que ahora le pertenecían. Revisando una increíble cantidad de material, el primer pensamiento de Alfrey es que había destapado las notas de un escritor de ciencia ficción. Lo que leyó fue tan increíble que parecía imposible que algo de eso fuera cierto.
Teniendo poco interés en lo que había comprado, Alfrey escondió las cajas en su sótano, pensando que las revisaría de nuevo más tarde, cuando tuviera más tiempo. Pasaron veinte años antes de que Alfrey encontrara tiempo una vez más para abrir las extrañas cajas. Desafortunadamente, el tiempo no fue muy amable con el preciado contenido dentro de las cajas.
Ya para entonces, los papeles se habían enmohecido gravemente, y la tinta se había descolorado de los años de negligencia en el húmedo sótano. Alfrey estaba determinado a no dejar desaparecer para siempre este material, y comenzó el laborioso esfuerzo de tratar de transcribir la información antes que fuera demasiado tarde.
Sin embargo, Alfrey pronto se encontró capturado en la lectura de los notables papeles. Las notas de Tesla son shockeantes en sus revelaciones de la vida secreta del científico. Una vida, que hasta ese momento nunca había sido mencionada por Tesla o documentada por sus biógrafos después de su muerte.
Estos diarios perdidos revelaban que en 1899, mientras estaba en Colorado Springs, Tesla interceptó comunicaciones de seres extraterrestres que secretamente estaban controlando a la humanidad. Estas criaturas estaban lentamente preparando a los humanos para una eventual conquista y dominación, usando un programa que había existido desde la creación de la humanidad, pero que ahora se estaba acelerando debido al incrementado conocimiento científico en la Tierra.
Tesla escribió sobre sus años de investigaciones para interpretar las extrañas señales de radio, y sus intentos de notificar al gobierno y a los militares respecto a lo que sabía, pero sus cartas, al parecer, se quedaron sin respuesta.
Tesla habó en confianza con varios de sus benefactores, incluyendo el Coronel John Jacob Astor, quien era propietario del hotel Waldorf Astoria. Estos benefactores escuchaban a Tesla, y secretamente fundaron lo que fue el comienzo de la primera batalla de la humanidad para regañar el control de su propio destino. Una batalla puesta en movimiento por Nikola Tesla. Mientras que esta información parece absolutamente increíble, Tesla dio pistas ocasionales a su difícil situación en varias entrevistas en periódicos y revistas.
Tesla pudo haber elaborado sobre el tema en un artículo llamado:
Talking With the Planets (Hablando con los Planetas)
En el periódico semanal Colliers